¿Porque un perro te llegaría a morder en la cara?
- Ezequiel Dello Russo
- 6 feb 2018
- 3 Min. de lectura
Actualizado: 18 oct
Un reciente estudio sobre mordidas de perro en la cara ha revelado un dato contundente:👉 en más del 75% de los casos, la mordida ocurre después de que una persona se inclina sobre el perro o acerca su rostro al suyo.
Y lo más preocupante: las víctimas suelen ser niños menores de 12 años.
Estos hallazgos confirman algo que los profesionales del comportamiento canino saben desde hace tiempo: muchas mordidas no son actos de agresión espontánea, sino la consecuencia de una mala interpretación humana de las señales del perro.
⚠️ El error humano: acercarse demasiado
El estudio, realizado con 132 casos de mordidas en la cara, mostró patrones claros:
En el 76% de los casos, la persona se inclinó sobre el perro justo antes del ataque.
En el 19%, la víctima acercó su cara a la del animal.
Más del 75% conocían al perro, pero ninguna víctima era el tutor adulto del animal.
El 84% de las víctimas eran niños menores de 12 años.
A menudo, la mordida ocurre sin gruñidos previos o señales visibles (solo un 6% de los perros mostró advertencias detectables).Esto no significa que el perro no haya avisado, sino que las personas no supieron leer sus señales.
🧠 Lo que los perros perciben y lo que nosotros ignoramos
Inclinarse sobre un perro o acercar el rostro puede interpretarse, desde su perspectiva, como una invasión de espacio o una amenaza directa.En la comunicación entre perros, el contacto visual prolongado, la presión corporal y la proximidad del hocico son comportamientos de dominancia o reto.
Cuando una persona —sobre todo un niño— imita estos gestos sin saberlo, el perro puede reaccionar con tensión, rigidez o miedo, y si siente que no tiene escapatoria, morder será su última opción.
La conductista Karen London lo explica así:
“Veo demasiadas personas realizando comportamientos de alto riesgo sin saberlo: abrazar, levantar o pegar sus caras a la de un perro. Es un error que puede tener consecuencias graves.”
🐶 Los datos del estudio: una mirada precisa
60% de las víctimas fueron mujeres.
Solo perros adultos mordieron la cara; más de dos tercios eran machos.
Más del 50% de las mordidas ocurrieron en el centro del rostro (nariz y labios).
43% de los niños estaban con sus padres y 62% con el dueño del perro cuando ocurrió el incidente.
Las mordidas de perros grandes requirieron atención médica con más frecuencia.
Curiosamente, situaciones que muchos pensarían más peligrosas —como cortar uñas, tirar del pelo o regañar al perro— no fueron las principales causas.La mayoría de los accidentes ocurrieron durante interacciones aparentemente cariñosas.
👀 Los perros sí avisan (aunque no lo veas)
Antes de morder, la mayoría de los perros intentan comunicar su incomodidad.Las señales suelen ser sutiles:
Cuerpo rígido o inmóvil de repente.
Evitar la mirada o girar la cabeza.
Mostrar las encías, lamerse los labios o bostezar fuera de contexto.
Gruñir, retroceder o congelarse.
Cuando estas señales se ignoran, el perro puede pasar del aviso a la acción en un segundo.Por eso, enseñar a niños y adultos a reconocer el lenguaje corporal del perro es clave para la prevención.
🧍♀️ Qué hacer si un perro te amenaza
Si alguna vez sientes que un perro está incómodo o muestra señales de tensión:
Quédate inmóvil, con los brazos relajados.
Evita mirarlo directamente.
Si se calma, retrocede lentamente.
Si avanza, coloca un objeto entre ambos (bolso, chaqueta, mochila).
Si caes al suelo, enróllate en posición fetal, cubre tu cabeza y no grites ni te muevas.
Estas medidas pueden marcar la diferencia entre un susto y una lesión grave.
👩🏫 Diez consejos clave para prevenir mordidas
Infórmate antes de elegir un perro. Consulta con un profesional para elegir el temperamento adecuado a tu entorno.
Socializa y educa a tu perro desde cachorro.
Proporciónale suficiente ejercicio y estimulación mental.
Evita juegos violentos o competitivos.
Usa correa y mantén control en lugares públicos.
Asegura tu jardín o espacios abiertos.
Cuida su salud física y emocional.
Consulta sobre vacunación responsable y evita sobrevacunar.
Esteriliza cuando sea oportuno, bajo recomendación veterinaria.
Educa a los niños para interactuar con respeto y calma.Nunca los dejes solos con un perro, por más confiable que parezca.
🩺 Más allá de la mordida: una cuestión de comprensión
La mayoría de los perros que muerden no son “agresivos”. Son perros que no fueron entendidos a tiempo.Cada mordida es una historia de comunicación fallida entre dos especies que comparten vida, pero no siempre lenguaje.
Prevenir no significa desconfiar del perro, sino comprender sus límites y enseñarle a confiar en nosotros.Y sobre todo, enseñar a los niños que amar a un perro también implica respetar su espacio y su manera de decir “basta”.
¿Quieres que te prepare una versión corta para redes sociales (Instagram o Facebook) con un carrusel de prevención —datos + consejos visuales— para acompañar este texto en tu blog?Podríamos titularlo:
“Las mordidas no son agresión: son comunicación ignorada.”
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